lunes, 28 de junio de 2010

Fin de semana

Este era uno bastante programado, lleno de cosas por hacer. El sábado madrugué a mi ensayo de danza!! =) en Bogotá, no sin algo de esfuerzo, pues el viernes me trasnoché decorando la torta que debía llevar al cumpleaños de mi tía, claro que valió la pena pues quedó muy bonita, además de deliciosa.

Despues de danza, de nuevo a la casa, almuerzo, ponernos lindos para la fiesta y a Bogotá otra vez! pasamos primero por la casa de mi suegra, y luego a la fiesta. Estuvo muy divertida, era una sorpresa para mi tía en sus 50 años, alguien decidió que el tema era mexicano, así que todos los hombres recibieron un bigote y las mujeres trenzas y muchos sombrerotes, les dejo fotos para que se rían.

En la noche el plan era reunirnos con los vecinos a ver el eclipse... llegamos a la casa a las 10 de la noche, y los 3 mayores se fueron con Martín, Jacobo quiso quedarse a dormir y yo, que con el trasnocho, la madrugada, la horneada del día anterior y el gimnasio de toda la semana, estaba tan cansada como no lo estaba en muuucho tiempo, aproveche para quedarme y acostarme a dormir también. Ellos llegaron a media noche, no pudieron ver el eclipse pues la noche se nubló... =(

Así, todos trasnochados, el domingo nos arrastramos fuera de la cama a las 7 de la mañana, para asistir a un concierto en Bogotá. A pesar del cansancio, y el sueño, y las peleas que esto produce en las horas de la mañana, el concierto fue MARAVILLOSO!!. Era de trombón, acompañado en algunas piezas por piano, en otras por otros trombones y una tuba. Debo decir que nos molestó mucho que a la entrada, al ver a Jacobo tan chiquito, nos dijeron que la edad mínima para ingresar a los conciertos era de 5 años ( y es cierto, con decreto y todo). Aquí es donde las familias homeschoolers protestamos y lanza en ristre nos mandamos a exigir el respeto por nuestros niños y a rechazar cualquier tipo de discriminación en contra de ellos (en este caso por la edad). Sin embargo, tras la orden de salir ante cualquier tipo de molestia del niño, nos dejaron entrar. Y para satisfacción personal puedo contar que estuvieron sentados, callados y felices todo el concierto =)
Esta es la página web del trombonista, muy divertido, nada acartonado, especial para ser el primer concierto en la vida de mis dos pequeños.

Al salir del concierto, buscamos algo rápido para almorzar, y ya estando en el centro de Bogotá, y aprovechando que el último domingo de cada mes la entrada a muchos museos es gratis, nos fuimos a conocer la Casa de la Moneda. No la disfrutamos como deberíamos, porque a Jacobo lo atacó el cansancio, y cuando eso pasa... ya se imaginarán. Le dimos la vuelta rapidito a toda la exhibición, pero yo, que no la conocía, me quedé con las ganas de verla con más calma, otro día será.

De ahí a la casita, los chiquitos durmieron todo el viaje, y los papás durmieron el resto de la tarde.

Un fin de semana MUY movido, normalmente no salimos de la casa a nada, tal vez por un helado en el pueblo y ya. Pero muy productivo, y todos quedaron felices.

2 comentarios:

Maulina dijo...

Te ha quedado preciosa la torta

Ana P. dijo...

Gracias! =)