Hoy, a pesar del bloqueo que siento de sólo pensar que mis propuestas vayan a recibir el rechazo como respuesta, tuvimos una tarde deliciosa.
Con Jacobo, Adelaida y Juan José hicimos yoga (con el libro que recibió Lalis en su cumpleaños), luego comieron crispetas, después pintamos con pasteles grasos y acuarelas un mapa del mundo para nuestros viajes virtuales (luego hablaré de esto con más detalle), después Juanjo se fue un rato a la calle y Jacobo siguió pintando.
Adelaida me dijo: quiero practicar sumas, y en eso estuvimos un buen rato, se le ocurrió dibujar sus dos manos en el papel para ayudarse a contar con los dedos (dibujados) y llegar a los resultados de la sumas. Más adelante se dio cuenta que casi no necesitaba esa ayuda.
Mientras tanto Jacobo también quiso pintar sus manos y luego recortarlas.
Después jugamos ajedrez con uno de sus regalos de cumpleaños ,que tiene un sistema muy lindo para ir conociendo cada ficha: trae un mazo de cartas que le indican a cada jugador cuál ficha mover y cómo puede moverla, y Jacobo, aunque ya se veía cansado, se interesó lo bastante en el juego como para acompañarnos un rato y ver como nos "comíamos" mutuamente las fichas. =)
Para terminar, con María Alejandra perparamos para la comida unos souflecitos de mazorca que sacamos del libro de recetas para niños de Miriam Camhi, era el desayuno que teníamos planeado para el día del padre, pero se embolató por las elecciones y la salida temprano hacia Bogotá.
No me puedo quejar: yoga, cocina, ajedrez, arte, matemáticas, geografía, en una sola tarde!!
4 comentarios:
Ana P. si esto es todo lo que hacéis así al natural, sin mayores planeaciones ni horarios, pues para que quieres más. Que tarde tan rica. Me tienes que invitar a esos souflecitos de mazorca y al yoga, para reirte de lo lindo con lo patosa para las posiciones, con las niñas las veces que hemos 'intentado' esto del yoga nos hemos partido de la risa.
Una tarde muy hermosa sin duda. Y como dice Silvia, toda tan natural.... Qué maravilla!
Chicas que ahora leo sus post y lo hago con sus voces y cadencias. Es muy bonito eso.
Me gusta mucho lo que haces con el unschooling. Si no trabajara fuera de la casa creo que es lo que intentaría.
Para ser sincera, casi siempre siento que no hacemos nada, pero si me pongo a hacer un recuento del día algo sale para rescatar.
Pero las tardes como estar requieren una disposición especial de mi parte, que no siempre logro, por eso me gustó tanto que todo haya fluido tan natural.
Un beso a todas =)
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