Le pusimos un poco de sal a un hielo, y aprendimos que la sal le cambia la temperatura de fusión. Justo en la parte que tenía la sal encima, se abrió un pequeño "tunel" al que le pusimos una gota de colorante de alimentos para verlo mejor.
Vimos cómo se evaporaba el agua de un plato que pusimos al sol, y vimos cómo aparecían gotitas de agua sobre un recipiente metálico lleno de hielo: magia! Así demostramos que en el aire hay muchas moléculas de agua en estado gaseoso que no vemos, pero que al entrar en contacto con una superficie tan fría, se condensan y forman las gotitas.
En este otro experimento atravesamos un hielo con un alambre, gracias al peso aplicado con las cucharas, pero como el movimiento del alambre a través del hielo era tan lento, alcanzó a formarse hielo de nuevo sobre el alambre. Claro que con el día tan caluroso que tuvimos el resultado no fue tan espectacular como se suponía, pues el hielo se derritió muy pronto.

Jacobo, al vernos a todos con agua y con hielos de aca para alla decidió hacer su propio "experimento" llenando un tarro de galletas con hielos y guardándolo en la nevera. =)

El último experimento era una fábrica de gas carbónico o CO2, mezclamos vinagre y bicarbonato de sodio en una botella y el gas pasaba por los pitillos a un vaso de agua y lo hacía burbujear. Las cantidades iniciales eran 1/2 cda de bicarbonato y 1/4 de botella de vinagre, pero como hicimos tres intentos, cada vez añadíamos más de uno y de otro hasta que el resultado nos dejó satisfechos. Aquí les dejo un video: