Hace mucho rato no escribía una entrada así, tan personal, pero es que hoy siento que ya no me queda más paciencia para mis hijos, se me acabó toda! Estas últimas semanas, y hoy especialmente ando súper irascible, no aguanto que me hablen, siento que me persiguen por toda la casa y que no me quieren dejar respirar, ni pensar, ni ser, ni hacer.
Yo, que decía que lo más importante que había aprendido de la primera etapa de mi crianza (cuando los dos mayores eran bebés) era que los comportamientos de los niños obedecen principalmente a las etapas por la que están atravesando y que no son NADA PERSONAL en contra mía, parece que hubiera olvidado esto, porque aunque lo sé, lo único que siento cuando se me acercan con sus interminables pedidos, quejas y peleas es que me quieren enloquecer!!! Y por lo que pueden ver parece que lo están logrando.
Me siento totalmente perdida de rumbo, estoy reaccionando sin pensar, estoy actuando con la memoria de las respuestas que recibí cuando era niña, y no con las que conscientemente se que son las que prefiero en la manera respetuosa de tratar a mis hijos.
Y lo peor son las peleas!!! Y es que están todos contra todos últimamente. Gritan, pelean, muerden, rasguñan, se arrebatan las cosas de las manos... Yo sólo quiero una familia tranquila donde todos nos respetemos y nos tratemos con cariño, quiero que mis hijos se preocupen por sus hermanos, se colaboren, se traten amablemente. Y yo, en lugar de dar el ejemplo, amenazo, grito y castigo, y me duele tanto cada vez que lo hago, y sé que esto no da resultados duraderos, pero en el momento parece ser lo único que los hace obedecer. No es mucho lo que les pido, son afortunados de no ir al colegio y no tener que hacer todo el día lo que alguien les ordene arbitrariamente y no son capaces de hacer dos o tres cosas mínimas que se les pide en la casa, eso me irrita hasta mas no poder!!
Quisiera ser más sabia, poder alejarme emocionalmente de las situaciones para poder pensar y decidir qué hacer, pero me siento tan básica y primitiva... me hace falta aprender tantas cosas... no sé si estar todo el día a mi lado sea lo mejor para mis hijos o si un poco de distancia nos vendría mejor a todos...Y aunque estoy convencida de que no quiero volver a ver a ninguno de mis hijos en un colegio, no sería sincera si no dijera que de vez en cuando extraño esas mañanas sin ningún niño interrumpiéndome, o llamándome o pidiéndome una galleta, y un vaso de agua, y un pedazo de queso, y un cuento, y un paseo a ver la vaca...
Pero como a este trabajo de ser mamá no podemos renunciar para conseguirnos otro que nos guste más, supongo que tocará cerrar los ojos, respirar profundo y creer que en unos días la marea va a bajar y el ambiente se va a relajar. Tengo que entender que todo depende de mí y de mi actitud, pero no puedo evitar las rabietas (mías) de vez en cuando.
MOSAICO ROMANO RECICLANDO REVISTAS
Hace 11 años